Su visita es estremecedora ante la magnificencia de la puna y sus montañas gigantes, los interminables mares blancos que forman los salares, un oasis de agua dulce con flamencos rosados, los guanacos y vicuñas que caminan apacibles en esta ciudad fantasma en el medio de la nada. Un paso obligado para llegar “Casualidad” es la imponente vista del Salar del Diablo en el ascenso al volcán Llullaillaco, un atractivo impresionante que embellece la llegada al pueblo.
Como llegar.
Consejo Importante.
Por la aridez del terreno, la altura (se está siempre por encima de los 4000 m) y la soledad de la zona durante muchos kilómetros más allá de Tolar Grande, es indispensable contar con más de un vehículo en muy buenas condiciones y asesoramiento previo de la zona.
fuente: Argentina Live
Si te ha gustado el artículo inscribete al feed clicando en la imagen más abajo para tenerte siempre actualizado sobre los nuevos contenidos del blog:
0 commentarios:
Publicar un comentario